Dos retratos sobre sendos personajes históricos, relevantes en su tiempo, de Jose María Navarro Darax y Francisco Rueda López, debidos respectivamente a los periodistas Eduardo D. Vicente y Evaristo Martínez – con firma habitual en la voz de Almería- hacían emerger el carisma de estos creadores de opinión, antagónicos, de la prensa del siglo XIX, y se aproximaban, de manera involuntaria, al entendimiento del contexto social de la época que viviera el insigne guitarrero Antonio de Torres Jurado. En la foto: Jose Mª Navarro Darax y Francisco Rueda López
Eduardo D. Vicente nos dice en su artículo “El maestro de la palabra” que Jose María Navarro Darax destacó por su oratoria y controló la imprenta católica “La Independencia” como una de sus responsabilidades desde el puesto de vicario general del tribunal eclesiástico, lo que nos lleva a considerarlo, de alguna manera, , como adalid de la prensa conservadora. Desde el cabo opuesto a este ideario, otro excelente artículo, impecablemente documentado, con firma de Evaristo Martínez, traía con el título “Rueda López, La prensa era él” la semblanza de un editor que había personificado en si mismo el arquetipo de hombre liberal, y que llegó a ganarse el aprecio de sus paisanos, en respuesta al trabajo comprometido que llevara al frente de la rotativa de “La Crónica Meridional”, fundada por él mismo. Francisco Rueda López es mencionado y recordado por Evaristo Martínez en su artículo como “Uno de los grandes protagonistas de la sociedad almeriense de la época”. Personaje inquieto y de gran humanidad “cualquier historia grande o pequeña encontraba acomodo entre las páginas de su periódico”. Rueda López se introdujo en los círculos literarios de la ciudad. Lucho en la gestora del ferrocarril para lograr la línea Linares- Almería. Participó en la creación del Ateneo e incluso perteneció a una logia masónica “Amor y justicia”. La cabecera de “La Crónica Meridional” se declaraba a si misma como “Liberal, independiente y de intereses generales” y, posiblemente, el secreto de su éxito y de su dilatada existencia -76 años- se debiera al afán de convertirse ella misma en una autentica crónica de lo que acontecía en la ciudad, sin dejar de prestar atención a las inquietudes de sus ciudadanos. El abandono secular que padecía Almería, por el problema de las comunicaciones, el anuncio del trasiego de las exportaciones en la sección vivera, o pequeños suplementos que anticipaban el diseño de la prensa de nuestros días, trascienden hoy desde sus páginas, observadas con una distancia de siglo y medio desde su fundación, convertidas ya en documentos históricos. Encerrados en los más de 25.000 ejemplares que editara “La Crónica Meridional”, dos números, de mediados de la época de 1880 uno, y de principios de1890 otro, suscitan un enorme interés por aportar datos reveladores de la vida del guitarrero Antonio de Torres Jurado. Unos datos que analizaremos en profundidad y que serían tergiversados posteriormente – casi cuarenta años después de su fallecimiento- usando como tribuna, para reescribir la historia, las páginas del influyente diario “La Independencia”, líder y heraldo de la prensa conservadora… |